¿La Mascarilla va antes o después del Acondicionador?
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¡Descubre el orden correcto de Aplicación!
¿Mascarilla o Acondicionador? ¿Debo usar los dos, o será la que la mascarilla reemplaza el acondicionador?
Hablando por estos días con una amiga que andaba muy preocupada con la sequedad de su cabello, comencé indagando con qué frecuencia se realizaba hidrataciones y cuál era su ritual de aplicación. Muy animada me ha afirmado enfáticamente, que no abre mano de las mascarillas de hidratación y que incluso nunca más volvió a comprar acondicionadores, pues con la emoliencia que le brindaba su mascarilla, era suficiente. Como no me esperaba esa respuesta, pues tampoco pude ocultar mi cara de asombro y acto seguido le dije: ¡pues ahí está la cuestión!
Para resolver este asunto, vamos primero a entender cuál es la función de una mascarilla y cómo actúa en el cabello.
¿CUAL ES LA FUNCIÓN DE LAS MASCARILLAS?
Las Mascarillas, ya sean hidratantes o reconstructoras, tienen como finalidad inyectarle a la estructura capilar, ciertos componentes como nutrientes, lípidos, vitaminas y proteínas, reponiendo así las sustancias necesarias para el correcto desarrollo de las fibras capilares, las cuales hemos perdido por diversos motivos: tracción, uso de químicos, exposición al sol, inmersión en agua de mar y piscinas cloradas, déficit nutricional, uso frecuente de dispositivos de calor, enfermedades, uso de medicamentos e inclusive episodios de stress.
Para que una MASCARILLA pueda penetrar en la parte más interna de la estructura capilar y depositar esos nutrientes, ella necesita que las escamas de la cutícula capilar se encuentren abiertas para así poder entrar y depositarse en las zonas capilares que estén carentes de nutrientes. Ese trabajo de abrir las cutículas, es realizado por el Champú, que por tener un PH más alcalino, abre las escamas del cabello, permitiendo el paso de los activos e ingredientes de los diversos tratamientos. Por lo tanto, la MASCARILLA debe ser aplicada inmediatamente después del champú.
¿CUÁL ES LA FUNCIÓN DEL ACONDICIONADOR?
Cuando se usa un ACONDICIONADOR, lo primero que notarás será una disminución significativa en el frizz o encrespamiento del cabello, un toque sedoso y mucho brillo, pero lo que no ves y nadie te ha dicho, es que además de los efectos ópticos que saltan a la vista y al tacto, se esconde uno aún más importante; y es la acción de sellado o cierre de las escamas capilares, pues cuando las escamas del cabello se encuentran abiertas por acción del shampoo o por el uso de químicos, estas no se volverán a cerrar, a no ser que le pongas a tu cabello, un producto con un PH más ácido y es aquí donde el ACONDICIONADOR entra a ejercer ese rol, pues gracias a su PH, ayudará a cerrar las escamas y por consiguiente a sellar la fibra capilar.
Una vez la fibra capilar esté sellada por la acción del acondicionador, todos los nutrientes que tu mascarilla ha depositado en tu cabello, se quedarán ahí dentro porque le hemos “cerrado la puerta” permitiendo así, que no se escapen y asegurando de esta forma la performance de nuestra Mascarilla.
¿AL FINAL CUAL ELIJO, MASCARILLA O ACONDICIONADOR?
Como verás una no reemplaza a la otra, ellas se complementan. Pero para aquellos que no necesitan la parte de acondicionamiento en los días de hidratación, la sugerencia es eliminar la MASCARILLA con agua fría para que la cutícula se quede correctamente sellada y el trabajo de la mascarilla esté garantizado.
RECUERDA: El ACONDICIONADOR tiene la función de sellar las fibras, por lo tanto, no se debe usar antes de las MASCARILLAS porque las cutículas de la fibra capilar deben estar abiertas para que la hidratación o nutrición penetre realmente en las fibras.